Los estremecedores detalles de la masacre de Gage Park que los acusados confesaron a la Policía de Chicago

“Maldad pura” fue como el juez de la Corte Criminal del Condado de Cook ante el que fueron presentados Diego Uribe Cruz y Jafeth Ramos describió este viernes 20 de mayo la masacre de Gage Park, de la que ambos están acusados.  Uribe Cruz, de 22 años, y Ramos, que era su novia, de 19 años, fueron arrestados el jueves 19 de mayo como los presuntos autores del asesinato de los seis miembros de la familia Martínez, en su casa en el barrio Gage Park, de Chicago, el pasado 2 de febrero de 2016.

Tanto a Uribe Cruz como a Ramos se les fincaron seis cargos de homicidio en primer grado y a ambos les fue negada en la corte la libertad bajo fianza.

Los asesinados fueron Rosaura Martínez, de 58 años, su esposo, Noé Martínez Sr., de 62, sus hijos Noé Martínez Jr., de 38, y María Herminia Martínez, de 32, y los hijos de Herminia, Leonardo Cruz, de 13, y Alexis Cruz, de 10.

Por lo que se ha revelado, Uribe Cruz era sobrino de Armando Cruz, esposo de Herminia y que se encontraba en México cuando se cometieron los crímenes. Uribe Cruz y Ramos, se informó, tienen un hijo de cerca de un año de edad y vivían en casa de la madre de Uribe Cruz, Nancy, que era hermana de Armando Cruz, padre de los niños asesinados.  Uribe Cruz era primo de los dos niños de cuyo asesinato él ha sido acusado.

De acuerdo a información proporcionada por las autoridades, y proveniente de las declaraciones de los dos arrestados, la causa de la masacre de Gage Park fue el robo y habría sido un crimen premeditado y planeado.

La secuencia de la masacre

Una reconstrucción provisional de lo sucedido, con base en las declaraciones de los acusados, indica que Uribe Cruz y Ramos llegaron a la casa de la familia Martínez en Gage Park el 2 de febrero de 2016 por la tarde y que, al ser él familiar, ambos fueron recibidos normalmente e incluso comieron junto a los Martínez.

Luego, Uribe Cruz, Ramos y Herminia Martínez subieron a la segunda planta de la casa, donde se dio una discusión, presumiblemente cuando los acusados le exigieron dinero. En algún momento se desató un altercado, ella rasguñó a Uribe Cruz y éste le disparó con un arma de fuego, matándola.

Al poco, Noé Martínez Jr. subió a la segunda planta, peleó contra Uribe Cruz y éste lo golpeó con la pistola, lo acuchilló y lo mató. Rosaura Martínez entonces comenzó a subir al segundo piso de la casa y dijo que iba a llamar a la policía. Uribe Cruz la golpeó e hizo que cayera por las escaleras. La mujer quedó inconsciente en el suelo y entonces, mientras ella yacía sin sentido Uribe Cruz la apuñaló y mató.

Luego, los niños Alexis y Leonardo, que estaban en la casa, fueron asesinados. Uribe Cruz se llevó a Alexis al sótano de la vivienda, donde según las declaraciones reveladas por las autoridades, lo apuñaló y mató, y luego subió de vuelta al primer piso de la casa, donde mató también con arma blanca al niño Leonardo, quien en vano le suplicó a su primo Uribe Cruz que no le quitara la vida.

Al poco, Noé Martínez Sr. llegó a la casa y Uribe Cruz lo atacó cuando entró y lo mató también de varias cuchilladas. Luego le robó la billetera.

Según las declaraciones, Ramos no mató a nadie pero ella ayudó a limpiar la casa tras la masacre y, según la Fiscalía, ella sabía del plan de asesinar a la familia y por ello tanto a Ramos como a Uribe Cruz se les fincaron las mismas acusaciones: seis cargos de asesinato en primer grado.

El botín y las reacciones

Luego de todo el horror, el botín que Uribe Cruz y Ramos se llevaron fue de solo $300 dólares en billetes, unos $250 en monedas, algunas joyas y una consola de videojuegos Xbox, según las autoridades.

Según las declaraciones de los acusados, ellos usaron parte de ese dinero para comprar comida y pañales para el bebé. Y dijeron que la pistola con la que Uribe Cruz mató a Herminia fue destruida y que el Xbox lo vendieron en una casa de empeño.

Al día siguiente del crimen, el 3 de febrero de 2016, Uribe Cruz se presentó a su trabajo mostrando rasguños y heridas, y al respecto dijo que él había sido atacado por tres sujetos, pero no habría dado más detalles. Y no fue sino hasta el 4 de febrero, cuando compañeros de trabajo de Noé Jr. notaron su ausencia y lo reportaron, que las autoridades se presentaron en la casa en Gage Park y descubrieron la masacre.

Anita Álvarez, fiscal del Condado de Cook, dijo en conferencia de prensa tras la presentación en corte este viernes de Uribe Cruz y Ramos que en toda su carrera no había visto un caso tan terrible y brutal.

La implicación de Uribe Cruz y Ramos se descubrió luego de que la policía confirmó, con datos de registros del teléfono celular de Uribe Cruz, que él estuvo en la casa de Gage Park el día y la hora en el que sucedieron los asesinatos.  Según las autoridades, los crímenes habrían sucedido entre 4 pm y 7 pm del 2 de febrero de 2016. El abuelo Noé Sr. fue visto hacia a las 6:30 pm de ese día comprado tamales y habría llegado a su casa a las 6:45 pm. Todos los celulares de todos los miembros dejaron de recibir llamadas entre las 5:30 pm  y 6:45 pm del 2 de febrero.

Además, ADN encontrado en el cuerpo de Herminia Martínez coincidió con el de Uribe Cruz, lo que selló la investigación y permitió que la policía hiciera los arrestos.

Ni Uribe Cruz ni Ramos tenían antecedentes criminales, aunque se ha indicado que Ramos tenía una orden de presentación por una falta relacionada a un robo menor.

Se ha indicado que Uribe Ramos trabajaba en una empresa que fabrica componentes electrónicos y donde empezó como empleado y llegó a supervisor y manager. También hizo trabajo de construcción. Se ha indicado que fue alumno de la escuela  Little Village High School, pero no se graduó.

Ramos trabajó como cajera en un supermercado, pero en el momento de los crímenes no tenía empleo porque cuidaba de su bebé. Tanto Uribe Cruz como Ramos nacieron en Chicago y tienen ciudadanía estadounidense.

Lourdes Oliva, abuela de Ramos, dijo que “la familia Ramos cree que ella no es culpable porque era una niña buena y dócil y era muy manipulada por Diego. Diego era un hombre manipulador y abusivo con la niña”.

Karen Trejo Martínez, amiga muy cercana de la familia asesinada, dijo que “Herminia confiaba mucho en Diego, él era como un hijo y amigo para ella. No me cabe en la cabeza como él pudo haber hecho esto. Realmente estoy en shock y me duele mucho”.

De acuerdo a Marcelino Miranda, cónsul de Protección del Consulado General de México, las autoridades del consulado y el gobierno de México están en contacto con Armando Cruz (esposo de Herminia y padre de los niños Alexis y Leonardo) para ayudarlo a conseguir una visa humanitaria y pueda viajar de México a Chicago a seguir el caso.  Armando Cruz ya habría expresado su deseo de viajar a Estados Unidos, pero no se ha confirmado si Violeta, hermana de Armando Cruz, quiere también venir a Chicago.

La próxima audiencia del caso está prevista para el 26 de mayo.